El precandidato presidencial, Miguel Uribe, reaccionó a la reciente consulta popular y a la situación política de Colombia, señalando que con la consulta, se acaba el Gobierno de Gustavo Petro.
Uribe criticó fuertemente al presidente actual, afirmando que este ha renunciado a cumplir con sus responsabilidades de gobernar y se ha entregado de lleno a la politiquería.
Petro y su afán de aferrarse al poder
Miguel Uribe señaló que Petro está utilizando los recursos públicos y programas sociales con el único objetivo de mantener su poder y su agenda política personal, enfocándose más en las elecciones de 2026 que en las necesidades reales del país.
Fracasó el gobierno de Petro: Incapacidad e incompetencia
Uribe no dudó en calificar al gobierno de Gustavo Petro como un total fracaso.
Según el precandidato, el actual gobierno ha demostrado ser incapaz e incompetente para gestionar el país, lo que ha derivado en una creciente crisis social, económica y política.
Reforma Laboral y a la Salud que agravan los problemas
En cuanto a las propuestas de reformas de Petro, como la reforma laboral y la reforma a la salud, Miguel Uribe fue enfático en rechazar estas iniciativas, argumentando que no resuelven los problemas estructurales de Colombia, sino que los agravan.
“Colombia necesita cambios y mejoras, pero no podemos permitir que haya destrucción”, dijo Uribe. Para él, las reformas impulsadas por el gobierno actual son ineficientes y contraproducentes.
Oposición constructiva para el futuro de Colombia
Uribe subrayó que su compromiso con el país no es solo de oposición, sino de propuestas constructivas.
Aseguró que su equipo y él siempre estarán dispuestos a hacer una oposición pensando en el bienestar de Colombia, con propuestas claras para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, proteger la democracia y asegurar un futuro próspero.
Con las palabras de Miguel Uribe, queda claro que el futuro político de Colombia está en juego.
A medida que se acerca la contienda electoral de 2026, la situación política se intensificará. Uribe reafirma su compromiso con un país democrático, próspero y sin los riesgos que representa un gobierno autoritario e ineficaz.