En un momento crucial para Colombia, donde la inseguridad y la violencia golpean con fuerza a regiones como el Catatumbo, el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe alza su voz contra las políticas erráticas del gobierno de Gustavo Petro.
La reciente declaración de conmoción interior es una muestra contundente de la falta de liderazgo y la incapacidad del Ejecutivo para proteger a los colombianos dentro del marco legal.
Conmoción Interior: Un Reflejo de la Incapacidad del Gobierno
El decreto de conmoción interior, declarado por Gustavo Petro debido a la crisis de orden público en el Catatumbo, ha sido duramente criticado por Miguel Uribe. Según el senador, esta medida excepcional no solo evidencia la falta de estrategias efectivas, sino que también representa una amenaza directa a los derechos de los ciudadanos.
“El decreto que declara la conmoción interior en el Catatumbo confirma la incapacidad del gobierno de Gustavo Petro para prevenir y enfrentar la violencia. Este gobierno utiliza medidas extremas como excusa para su incompetencia y para justificar su falta de acción previa”, señaló Uribe.
El senador resalta que, antes de recurrir a medidas de excepción, el gobierno debería rendir cuentas sobre qué acciones concretas se han implementado para mitigar la crisis. La violencia, los desplazamientos masivos y el crecimiento de los cultivos ilícitos en el Catatumbo son problemas que requieren estrategias sólidas y no improvisaciones.
Las Políticas del Gobierno: Promesas Vacías y Decisiones Desesperadas
Miguel Uribe denuncia que el estado de conmoción interior no soluciona el problema de fondo, sino que impone restricciones legales, limita derechos y aumenta los impuestos, todo mientras las comunidades más afectadas siguen en el abandono.
Además, cuestiona el uso de esta medida para impulsar contrataciones directas y modificaciones presupuestarias que carecen de transparencia.
“Este gobierno quiere meter la mano al bolsillo de los colombianos para financiar un modelo de despilfarro e improvisación. Mientras tanto, las comunidades afectadas siguen sumidas en la inseguridad y la pobreza”, advirtió Uribe.
El senador también responsabiliza a las políticas de “Paz Total” y la cooperación con la dictadura de Nicolás Maduro como factores que han debilitado a las fuerzas armadas y permitido el avance del narcotráfico y los grupos armados ilegales.
Soluciones reales: Un Camino Claro para el Catatumbo
Ante esta grave crisis, Miguel Uribe presenta un plan estructurado y firme para enfrentar la violencia en el Catatumbo, con el fin de devolver la seguridad y la estabilidad a la región:
- Militarizar las ciudades aledañas para proteger a la población civil y garantizar su integridad frente al asedio de los grupos armados.
- Erradicar las 50.000 hectáreas de cultivos de coca que financian el conflicto. Sin acabar con esta economía ilegal, la violencia persistirá.
- Implementar un modelo productivo alternativo para los campesinos, permitiéndoles integrarse a la economía lícita y abandonar la dependencia del narcotráfico.
- Atender dignamente a los desplazados de la violencia, reconociendo que ningún colombiano debe sentirse abandonado. La falta de respuesta del gobierno actual es una afrenta a los derechos humanos más básicos.
- Impulsar el cambio político en Venezuela, pues la connivencia entre el chavismo y los grupos armados colombianos ha sido una constante que solo se agravó con el apoyo tácito de Petro al régimen de Maduro.
- Reconocer a las guerrillas como lo que son: grupos terroristas, y tratarlas como tal en lugar de ofrecerles impunidad bajo la bandera de una “paz total” que solo ha sembrado más caos y desconfianza.
La Seguridad No Se Decreta, Se Construye
El precandidato reafirma que la seguridad de los colombianos no puede depender de medidas desesperadas y temporales. En cambio, se debe construir con decisiones firmes, estrategias efectivas y transparencia en la ejecución de recursos.
“La seguridad no se decreta. Requiere liderazgo, planificación y resultados tangibles. Colombia necesita un gobierno que rinda cuentas y que ponga a los ciudadanos por encima de la improvisación y el populismo”, concluyó el senador.
Un Verdadero Cambio para Colombia
La situación en el Catatumbo es el claro reflejo de un gobierno que ha fallado en proteger a su pueblo y garantizar la seguridad nacional. Es inadmisible que la administración de Petro sea la causa de que miles de colombianos sigan siendo víctimas del desplazamiento y la violencia.
Hoy, más que nunca, se necesita de acciones contundentes para devolverle la paz al Catatumbo y al país.